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Deportes

Rory McIlroy, ¿el sucesor de Tiger Woods?

Por Juan Andrés Muñoz

“¡Vamos Rory! ¡Vamos Rory!” Los cánticos en el Congressional Country Club durante el fin de semana lo dijeron todo.

Había una sensación de que el Abierto de Estados Unidos 2011 sería histórico después de que Rory McIlroy obtuvo un avasallador resultado el primer día, pero su juego durante los siguientes días fue suntuoso en calidad y atractivo para los aficionados al golf. Una multitud de estadounidenses fervientemente patriotas estaban encantados, sorprendidos y cautivados con las hazañas del joven golfista de Irlanda del Norte.

Sus logros con el palo y la pelota también fueron demasiados para ser ignorados, su forma y fortaleza mental después de su colapso en Augusta el último día, muy admirable para no ser aplaudido. Sin duda, una nueva dinastía en el golf ha comenzado.

McIlroy dio muestras de su potencial como un grande del golf por primera vez cuando disparó una ronda de inicio nueve bajo par 63 en la primera ronda del último Abierto Británico en St. Andrews, y aunque después de eso obtuvo un 80, un atisbo de su genialidad se dejó ver.

Volvió a brillar en el Nacional de Augusta, antes de que en un extraño capricho del destino, viniera su debacle en la última ronda en el Master que resultó ser una bendición disfrazada. Su fortaleza mental posterior para superar la decepción, seguramente fue la última pieza para este rompecabezas de un jugador campeón.

El golfista de 22 años dijo lo mismo. Su curva de aprendizaje también mejoró con su reciente viaje a Haití, donde humildemente admitió que nadie había escuchado hablar de él ahí, y mucho menos lo habían visto jugar. Ese viaje y las experiencias fueron una verdadera revelación para McIlroy cuando fue testigo de primera mano del sufrimiento de la gente que intentaba reconstruir sus vidas después de una tragedia y el desastre.

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Le dio una perspectiva en la vida, que lo llevó a concluir que en comparación, no era realmente la gran cosa echar a perder una oportunidad para ganar la codiciada chamarra verde.

Rory dijo todo el tiempo durante su preparación para este major que la decepción de Augusta siempre lo acompañó, algunos dudaron de su decisión, pero ahora esos críticos se comen sus palabras.

McIlroy es el aparente sucesor de Tiger Woods y el Abierto de Estados Unidos fue su presentación oficial. El joven príncipe del golf ya está en camino de convertirse en el rey indiscutible del juego. Una actuación verdaderamente majestuosa de principio a fin que da a Woods mucho que pensar desde la barrera.

Tiger regresará algún día a la cima de su potencial como jugador, pero es difícil saber cuando. En el momento en que lo haga ya habrá un poderoso rival esperándolo. ¿Y quién no se está lamiendo los labios esperando la llegada de una enorme rivalidad en los próximos meses y años? Woods ha ganado 14 majors. McIlroy ya ganó uno. El choque de titanes viene en camino. ¡Tráiganlo!
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