Tiroteo en Lafayette: ¿deben revisarse las medidas de seguridad en los cines?

(CNN Money) - Se supone que, en las salas de cine, los sentimientos de miedo y terror vienen de la gran pantalla y de los retumbantes altavoces.

Pero el jueves, una explosión de violencia de la vida real interrumpió la proyección de "Trainwreck", a las 7 de la tarde, en Lafayette, Luisiana. Los disparos mataron a dos espectadoras e hirieron a otras siete personas. El agresor murió en un aparente suicidio.

Sin duda, el incidente avivará las inquietudes en relación a la seguridad en las salas de cine y sobre cuál es la responsabilidad que los propietarios de las mismas tienen para garantizar la seguridad de los cinéfilos.

Tras la masacre en un cine de Aurora, Colorado, en el 2012, en algunos cines se redoblaron las medidas de seguridad. Pero las medidas que se tomaron –más guardias en algunos casos–, en su mayoría, no fueron publicitadas.

Quizá lo que es evidente, es lo que no cambió. La venta de entradas no se vino abajo. Los estadounidenses aficionados al cine no fueron disuadidos.

Las salas de cine a través de Estados Unidos permanecen fundamentalmente como lugares libres, en donde los poseedores de entradas pueden deambular adentro y afuera, sin ser molestados por las intensas medidas de seguridad que ahora son representativas de los aeropuertos y los edificios públicos.

Es duro, y también triste, imaginar detectores de metal y máquinas de escaneo de bolsos en el vestíbulo del multicine local.

El tiroteo del jueves ocurrió en el complejo de cines Grand 16, el cual es propiedad de Southern Theatres, una cadena con sede en Nueva Orleans.

Keifer Sanders, quien estaba en el cine, calculó que aproximadamente eran 100 personas las que estaban allí para la proyección de "Trainwreck". La comedia con excelentes críticas y protagonizada por Amy Schumer se estrenó el fin de semana pasado.

"Mi corazón está destrozado y todos mis pensamientos y oraciones están con todas las personas en Luisiana", escribió Schumer en Twitter después de enterarse del tiroteo.

El distribuidor de la película, Universal, no quiso hacer comentarios el jueves por la noche. De igual manera reaccionó un portavoz de la Asociación Nacional de Propietarios de Cines (NATO, por sus siglas en inglés), la cual representa a todas las grandes cadenas, como AMC y Regal.

Estadísticamente, las oscuras salas de cine son lugares seguros para pasar el tiempo. La gente disfruta del cine, en parte, con base en la confianza de que están a salvo y seguros en su asiento, que pueden relajarse y dejarse llevar por la historia que se desarrolla en la pantalla.

Esa es la razón por la que es especialmente horroroso escuchar de violencia en una sala de cine porque es un lugar que la gente asocia con la fantasía y el entretenimiento.

Un testigo, Jalen Fernell, le dijo a Don Lemon de CNN que cuando escuchó disparos, "al principio casi pensé que eran parte de la película".

Algunos testigos dijeron cosas similares cuando estallaron los disparos en Aurora, durante la proyección de media noche de "Batman: el caballero de la noche asciende" el 20 de julio del 2012.

La semana pasada un jurado encontró a James Holmes culpable de 24 cargos de asesinato por la matanza.

La noche del jueves, se especuló de inmediato que el tiroteo en Lafayette podría ser una imitación del crimen, dada la saturada cobertura de noticias por el veredicto de Aurora, pero no hay evidencia de que en realidad lo fuera.

Tras la masacre de Aurora, hay múltiples demandas contra el propietario del cine, Cinemark, serpenteando por los tribunales. Según The Denver Post, hay fechas de juicios en mayo y julio del 2016 para algunas de las demandas civiles, las cuales por lo general afirman que la seguridad de Cinemark era insuficiente.

Si esa es un área de debate que surge del tiroteo de Layafette, otra área de debate girará en torno a la prevalencia de armas.

Sandy Phillips, cuya hija, Jessica Redfield, fue asesinada en el cine de Aurora, escribió en Twitter cuando se enteró del nuevo tiroteo: "Aquí vamos de nuevo Estados Unidos". ¿ESTO es libertad?"

Schumer, quien escribió y protagoniza "Trainwreck", no dijo nada acerca del contexto político del tiroteo en el cine, y el director de la película, Judd Apatow, no intervino de inmediato a través de los medios sociales.

Pero las opiniones de Apatow en la materia son bien conocidas: en febrero, él fue el orador principal en una recaudación de fondos para la prevención de la violencia por armas de fuego en Los Ángeles.

"Las leyes responsables para armas de fuego son esenciales", dijo él en el evento, informó Deadline.com. "Es impactante que, aún después de todos los tiroteos masivos que han ocurrido, no se esté haciendo más para hacer que nuestro país sea más seguro".