Erdogan ordena que la histórica Santa Sofía se vuelva a convertir en una mezquita en Estambul
(CNN) -- Recep Tayip Erdogan ordenó que la histórica Santa Sofía de Estambul se vuelva a convertir en una mezquita después de que un tribunal turco anulara un decreto presidencial de 1934 que la había transformado en museo.
Poco después de que el máximo tribunal administrativo de Turquía emitiera la decisión largamente anticipada, Erdogan aprobó un decreto presidencial transfiriendo la gestión del sitio del Ministerio de Cultura a la Presidencia de Asuntos Religiosos, allanando el camino para su conversión. Erdogan ha sido un gran defensor de la medida.
La iglesia de Santa Sofía fue la primera catedral cristiana del imperio romano y se encuentra entre las estructuras bizantinas más conocidas del mundo. Pasó de ser una catedral ortodoxa griega a una mezquita en 1453, cuando los otomanos conquistaron Constantinopla y cambiaron el nombre de la ciudad a Estambul. El sitio histórico se convirtió en museo en 1935 como parte de un decreto del padre fundador de la Turquía moderna, el secularista Mustafa Kemal Ataturk.
Erdogan se ha posicionado como amigo de los islamistas conservadores en Turquía, alejando al país de esas raíces secularistas.
İsmail Kandemir, jefe de la Asociación al Servicio de las Fundaciones Históricas y el Medio Ambiente, dijo después de la audiencia que "usar Santa Sofía como museo perjudica la conciencia de las personas", según la agencia de noticias turca Anadolu.
Horas antes del anuncio, la UNESCO pidió a Turquía que evitara cambiar el "valor universal excepcional" del sitio y solicitó una "notificación previa", indicando que podría cambiar el estado de Santa Sofía en la Lista del Patrimonio Mundial.
La asociación presentó una demanda ante el Consejo de Estado en 2005 pidiendo que el sitio volviera a ser una mezquita, pero fue rechazada en 2008, según la agencia de noticias turca Anadolu.
Luego presentó otra demanda en 2016, en la que decía que se había violado la libertad de religión, pero la Corte Suprema rechazó el caso en 2018, informó Anadolu.
Erdogan ha expresado molestia por la oposición internacional al plan, liderada por la vecina Grecia. "Dicen 'no conviertan a Santa Sofía en una mezquita'", dijo en una entrevista con la emisora estatal TRT el 5 de julio. "¿Están gobernando Turquía ustedes o nosotros? Turquía tiene instituciones. Si se va a dar ese paso, es obvio quién tiene la autoridad para hacerlo", afirmó.
Muchos analistas dicen que la medida de Erdogan podría tener la intención de consolidar el apoyo de sus votantes en momentos en que el país enfrenta una economía en declive y un aumento del desempleo. Las relaciones entre Turquía y Grecia también son tirantes debido a las tensiones geopolíticas en el Mediterráneo oriental, incluida la larga disputa sobre Chipre y los migrantes que cruzan la frontera entre los países.
En una declaración emitida el miércoles, el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, instó a Turquía a mantener este sitio Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO "como un ejemplo de su compromiso de respetar las tradiciones religiosas y la historia diversa que contribuyó a la República de Turquía, y garantizar que se mantenga accesible para todos".
Además dijo que el estatus de museo había permitido que personas de todo el mundo pudieran conocer un "logro magnífico".
"Este sitio extraordinario es un testimonio de la expresión religiosa y del genio artístico y técnico, reflejado en su rica y compleja historia de 1.500 años", agregó.
"Estados Unidos considera que un cambio en el estatus de Santa Sophia disminuye el legado de este notable edificio y su capacidad sin igual –tan rara en el mundo moderno– de servir a la humanidad como un puente muy necesario entre las diferentes tradiciones de fe y culturas".
Un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Turquía dijo que estaba "asombrado" por la declaración de Pompeo.
Hami Aksoy dijo que Turquía garantizaba la "libertad de religión y creencias" de sus ciudadanos. El país protege "todas las propiedades culturales que poseemos sin distinción, incluida Santa Sofía, en el marco de la tradición de tolerancia derivada de nuestra cultura e historia", agregó.
"Turquía ha apreciado sensiblemente el valor histórico, cultural y espiritual de Santa Sofía desde su conquista", dijo.
"En esta ocasión, recordamos una vez más una realidad que tenemos que repetir constantemente. Santa Sofía es propiedad de Turquía, como todos nuestros bienes culturales ubicados en nuestra tierra. Toda disposición de poder con respecto a Santa Sofía es también una cuestión relativa a nuestros asuntos internos dentro de los derechos de soberanía de Turquía", afirmó.
Y el portavoz agregó: "Naturalmente, todos son libres de expresar su propia opinión. Sin embargo, se pasa de la raya hablar de nuestros derechos de soberanía usando un lenguaje de 'advertencia e imposición'".