Gioja, presidente del PJ: "De Vido es inocente hasta que alguien demuestre lo contrario"
(CNN Radio Argentina) -- José Luis Gioja, presidente de Partido Justicialista (PJ), aseveró este sábado en CNN Radio que "no existe ninguna división entre peronismo y kirchnerismo", por lo cual el espacio gobernante del Frente de Todos está "más unido que nunca" y "sin polémicas". Y reforzó: "Hay que seguir trabajando en la unidad".
En el ciclo Hora 10, el legislador sanjuanino expresó sobre la pulseada entre el Gobierno y el campo que "los grandes grupos concentrados de riqueza, los sojeros, no aceptan el escalonamiento. Han seguido siendo un partido político. Todas sus intenciones tienen que ver con el PRO y con los que nos gobernaron hasta el 10 de diciembre con políticas liberales. Mal no les va. No ponen un granito de arena y eso suena caprichoso. Ellos construyeron este estado de pobreza, marginación y hambre".
Los sojeros han seguido siendo un partido político. Todas sus intenciones tienen que ver con el PRO
Gioja agregó, en diálogo con Francisco Olivera, que "quedó demostrado que las políticas de Macri era lo que ellos querían, mientras la agricultura y la industria agrícola tienen problemas regionales importantes".
El dirigente peronista arremetió contra "un sector importante de la Justicia" que, según su punto de vista, "se ha prestado al lawfare" apelando --sostuvo-- a "la condena social a través de los medios amigos", que simultáneamente "tapaban los Panamá Papers", según argumentó.
No existen divisiones entre peronismo y kichnerismo
Gioja estimó, por otra parte, que el ex ministro de Planificación del kirchnerismo Julio de Vido, recientemente liberado por una decisión del Tribunal Oral Federal 1 que decidió su excarcelación en el caso Río Turbio, por el que estaba en prisión domiciliaria, "es inocente hasta que alguien demuestre lo contrario. Un compañero que ha trabajado mucho, al que le dieron la prisión preventiva por una estupidez".
Muchas causas impulsadas durante el macrismo, explicó Gioja, están "viciadas". El ex presidente "marcaba qué juez sí y que juez no. Una vez se le escapó que había que sacar a Ramos Padilla. Era una máquina de perseguir y desprestigiar. Al testigo arrepentido que no hablaba mal de Cristina Kirchner lo dejaban preso".