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Mundo

Militares sirios disparan al azar contra civiles, según la oposición

Por cnninvitationsaccount

(CNN) — A pesar de la promesa del gobierno de Siria de retirar sus fuerzas de los centros de población, militares atacaron a opositores en el norte del país y se enfrentaron a desertores, afirmaron activistas este martes.

El ejército sirio bombardeó Binnish, Taftanaz y Taoum y sus helicópteros dispararon contra civiles que huían, afirmó que el Comité de Coordinación de Binnish, un grupo de oposición.

"Se trata de los combates más intensos que hemos visto hasta ahora en Binnish desde el comienzo de la revolución", dijo Basher, un activista de la oposición. "No habíamos visto estos bombardeos al azar sobre la Binnish y sus alrededores. Están utilizando helicópteros y disparando al azar contra civiles en las ciudades".

Fuego cruzado y bombardeos en Taftanaz mataron al menos a 10 personas, aseguró el grupo de activistas en Binnish.

Enfrentamientos también se produjeron entre combatientes militares y la resistencia en las provincias de Daraa, Idlib y Damasco. Un grupo de supuestos militantes atacaron la casa de un oficial del Ejército, matando a dos de sus guardaespaldas en Aleppo, según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.

La violencia se produce un día después de que diplomáticos dijeron que el gobierno sirio acordó comenzar a retirar sus fuerzas y completar su retirada para el 10 de abril.

El plan del enviado de la ONU y la Liga Árabe para Siria, Kofi Annan, pide a las autoridades retirar a sus fuerzas y detener el movimiento de tropas hacia los centros de población y poner fin al uso de armas de alto poder.

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Un equipo de avanzada se dirige a Siria para discutir el despliegue de un equipo de observación para supervisar un alto el fuego, según la oficina de Annan.

El anuncio de la retirada de Siria ocurre el mismo día en que Rusia —que junto con China, vetó en el Consejo de Seguridad de la ONU los intentos de condenar al régimen de Bashar al Assad— presionó a Damasco para que retirara sus tropas.

"Si la retirada de las tropas no va acompañada de acciones similares de los que luchan contra el gobierno sirio, yo creo que no habrá resultados pronto", dijo el canciller Sergey Lavrov, de acuerdo con la agencia de noticias estatal Itar-Tass.

Susan Rice, embajadora de Estados Unidos ante Naciones Unidas, expresó su escepticismo sobre la promesa de los sirios de que comenzarán a retirar sus tropas.

"Seamos realistas", dijo el pasado lunes. "Hemos visto un compromiso de poner fin a la violencia, seguido por una masiva intensificación de la violencia. Estados Unidos lo diría una vez más, la comprobación está en las acciones, no en las palabras”.

El plan de Annan también se ocupa de la ayuda humanitaria y de los detenidos, dos temas de la agenda de Jakob Kellenberger, presidente del Comité Internacional de la Cruz Roja, quien se ha reunido con los principales ministros del gobierno en Damasco. Kellenberger también tiene previsto visitar las zonas afectadas por los combates y supervisar el trabajo de la Cruz Roja y la Media Luna Roja Siria.

“Estoy decidido a lograr que la Cruz Roja y la Media Luna Roja expandan su presencia, alcance de sus actividades para atender las necesidades de las personas vulnerables", dijo Kellenberger, antes de llegar a Damasco el pasado lunes. “Esto va a ser un elemento clave durante mis conversaciones con los funcionarios sirios”.

La Cruz Roja ha obtenido un mayor acceso a muchas zonas afectadas por los combates, algo considerado "positivo".

Kellenberger está discutiendo una ampliación de esas actividades, la aplicación de una tregua de dos horas diarias para distribuir ayuda de emergencia, y un mayor acceso a los detenidos, dijo el portavoz de la agencia, Hicham Hassan.

"Las visitas a las personas que han sido detenidas sigue siendo una prioridad para nosotros", afirmó Kellenberger, en su tercera visita a Siria desde junio. La Cruz Roja quiere entrevistar a los detenidos sin la presencia de las fuerzas de seguridad o de otros detenidos, dijo Hassan.

El régimen sirio ha culpado "grupos armados terroristas" de la violencia en Siria, pero la mayoría de los reportes desde el interior del país indican que el gobierno está barriendo vecindarios en un intento de acabar con los disidentes que buscan el derrocamiento del presidente al Assad.

Naciones Unidas ha estimado que al menos 9,000 personas han muerto en Siria desde que comenzaron los disturbios hace más de un año, mientras que activistas de la oposición han puesto la cifra en más de 10,000.

Kareem Khadder, Ivan Watson, y Amir Ahmed contribuyeron con este reporte.